Los muxes de Juchitán

Una persona muxe en una fiesta oaxaqueña de aceptación y respeto por la diversidad sexual
Secretaría de Cultura de la Ciudad de México

Hoy en día el debate que existe entre el sexo y el género muestra una división entre la cultura y la política de muchos países del mundo. La mayoría de los sistemas binarios que existen en la cultura occidental no representan las comunidades indígenas que han usado un tercer género durante siglos. Estas culturas indígenas a través del mundo entienden que hay una gran diferencia entre el sexo y el género. La idea de un tercer género desapareció en muchas culturas indígenas, junto con otras tradiciones, por culpa de la influencia europea y otras sociedades occidentales. Aunque muchas de estas culturas han experimentado discriminación, algunas sociedades reconocen que un tercer género no se basa en una identidad sexual, sino en una identidad de género cultural y espiritual. El concepto de un tercer género o un género diferente en las comunidades indígenas en América del Norte no es nuevo. Estos géneros han existido entre los crow y los apaches, entre otros, y en México entre los aztecas y los dioses maya.

Los muxes son un tercer género reconocido entre la comunidad zapoteca en Oaxaca, México. Son personas nacidas con cuerpos masculinos pero que no se identifican como hombres. Se visten como mujeres, pero tampoco se consideran como mujeres. Los muxes mantienen la vestimenta tradicional, la lengua indígena, y otras tradiciones culturales que han desaparecido entre la comunidad general de los zapotecos. En el pueblo de Juchitán de Zaragoza en Oaxaca, hay una población grande de muxes que forman una parte esencial de la sociedad. En esta región en particular, hay una aceptación extendida de los muxes y este tercer género ha sido reconocido y celebrado desde la época prehispánica. Ser muxe no depende de la orientación sexual, es un género e identidad cultural. A causa de la cultura rica de los muxes, Juchitán se ha convertido en un lugar de tolerancia y aceptación para la comunidad LGBTQIA.

Muchos muxes tienen papeles en la sociedad que son tradicionalmente femeninos: cocinar, bordar, ser ama de casa, peluquero, estilista, etc. Además, los muxes no se presentan iguales. Una faceta de este género es que los muxes se pueden vestir y presentar de la manera que quieran. Algunos prefieren ropa occidental y otros siempre llevan trajes tradicionales. Este tipo de género inconformista es algo que no existe en muchas culturas del mundo y hace que los muxes sean únicos.

Durante las velas de la región de Tehuantepec, los muxes generalmente se visten en trajes tehuanas que son vestidos tradicionales bordados con flores. También se ponen el huipil grande. Esta manera de vestir inspiró a Frida Kahlo cuya madre era oaxaqueña. En algunos autorretratos y pinturas de Kahlo, se puede ver la ropa tradicional zapoteca. Es importante notar que Frida Kahlo también fue una artista que cuestionó los estereotipos del género y hoy en día ella es un símbolo para la comunidad muxe tanto como la comunidad LGBTQIA. Las personas muxes dan esperanza a otras comunidades marginalizadas de que ellas también pueden prosperar, y Oaxaca es un ejemplo para el resto de México de aceptación y tolerancia de la diversidad sexual.

El tercer género: Un vistazo a los muxes de México

Este cortometraje artístico del director Ivan Olita viene de National Geographic. Muestra el mundo de los muxes modernos de Juchitán a través de la poesía de sus propias voces.

Preparación para clase:

  1. Hagan una búsqueda en el internet sobre otro tercer género que aún existe en el mundo. ¿Qué encontraron? ¿En qué país o cultura se encuentra este tercer género? Escriban dos hechos o datos relevantes que aprendieron.
  2. ¿Piensan que los muxes seguirán teniendo un papel dentro de la sociedad zapoteca? ¿Podrán obtener los muxes un rol más importante en la sociedad mexicana?
  3. ¿Cuál es el lugar de tolerancia y aceptación que existe en nuestro país y dónde se localiza?