Invasión musulmana y Reconquista

En el año 711 los musulmanes del norte de África invadieron la Península Ibérica. Los musulmanes convirtieron a la Hispania romana en uno de los centros intelectuales de la cultura islámica y ocuparon parte de la península durante unos ocho siglos. Mostraron total normalidad y tolerancia hacia los cristianos y judíos que vivían en la península. Un ejemplo de esta convivencia existía en la ciudad de Córdoba donde los tres grupos religiosos y culturales vivían en armonía.

Desde el principio de la invasión musulmana, los cristianos querían recobrar sus tierras y resistieron el poder musulmán. El día de hoy este período es llamado la Reconquista. En el año 718 comienzan a formarse los principales núcleos cristianos que lucharon contra los musulmanes. Los Reyes Católicos, Isabel y Fernando, acabaron la reconquista de España el 2 de enero de 1492, tomando la última ciudad bajo control musulmán, Granada, y expulsando al rey Boabdil. El pluralismo religioso que existía hasta entonces en la Península Ibérica se terminó con la expulsión de los judíos y la dominación de los musulmanes. Los musulmanes no fueron expulsados, pero tuvieron que convertirse al cristianismo para quedarse en la Península al partir del 1492.